Las conversaciones de madrugada tienen muchos temas en su sino, pues unas veces están motivadas por el desvelo, otras por la tranquilidad, otras, por la compañía...
Unas veces son largas, otras cortas, otras conversaciones no son más que silencios y miradas, o desdenes...
Cuando las tienes, sabes que la mañana se hace eterna pues sólo quieres que llegue la noche para descansar; y cuando no las tienes cambiarías esa frescura de la mañana por una buena conversación de madrugada.
Cuando no las tienes... se echan de menos y para paliar esa "necesidad", empiezo esta andadura en este humilde blog.
Un saludo y Gracias.